Algunas de las razones que pueden generar miedo al compromiso en una persona que se inicia en una relación pueden ser:
1- Perder la libertad, es decir, perder la posibilidad de hacer lo que queremos cuando queremos. Por ejemplo: Tú chica… seguro piensas que si le dices que vas con tus amigas de fiesta podría ponerse celoso. Tú chico… piensas que si le dices que te vas de viaje con tus amigos a una despedida de soltero ella se enfadará.
2- Miedo a que si te comprometes con tu chico(a) nunca más vas a poder divertirte como lo hacías antes. Esto también puede hablarnos de miedo a asumir nuevas responsabilidades en tu vida. Por ejemplo: miedo a tener que pasar el finde haciendo cosas en casa y no de fiesta.
3- Si te comprometes con alguien tienes miedo a perderlo, miedo al abandono y quedarte solo/a. En algunos casos alguno de vosotros no estáis suficientemente seguros de que será algo duradero. Aquí es posible que se active un mecanismo de defensa relacionado con la desconfianza.
4- Salen a la luz las eternas dudas… ¿Si no funciona? ¿Qué hacemos? ¿Si me es infiel? ¿Si no le gusto a su familia? ¿Si no queremos lo mismo? ¿Si tenemos otros proyectos y no quiere o puede acompañarme? Y ¿Tendremos mascota? ¿hijos? ¿familia? ¿responsabilidades? ¿Tengo la edad adecuada?... entre muchas otras incógnitas que surgen cuando pensamos en compartir nuestra vida junto a otra persona.
5- Temor a que la relación cambie de cuando eran novios a cuando quieren dar el paso a vivir juntos o casarse, por este motivo ocurre que muchas parejas prefieren retrasar este paso.
Ahora que ya hemos expuesto algunos motivos o razones por las que se activa el miedo al compromiso nos queda dejaros con una pequeña reflexión: “Lo más importante que debéis hacer si os encontráis en una situación de este tipo, es evaluar vuestras verdaderas necesidades y arriesgaros a afrontar vuestros miedos, de esta forma éstos desaparecerán y podrán disfrutar al máximo de la relación.
Foto: El Bloc de Joan